No había sido un buen año para el trigo. Sin heladas en invierno las raíces no estaban desarrolladas. Con el excesivo calor en primavera y sin lluvia, la cosecha sería escasa y de poca calidad.
Así, ya en julio, se pasaban comentando todo esto, en las comidas y las cenas, una joven pareja de agricultores: si hubiera hecho frío…, si no hubiera hecho tanto calor…., si hubiera llovido…tendríamos que haber plantado mejor…
La pareja tenía 3 niños, todos pequeños. El mayor de ellos, con apenas 5 años, reclamo con énfasis una noche a sus padres:
-“¡Pero papás, eso ya no está¡ ¡Eso ya ha pasado por lo menos, por lo menos, hace media hora¡”
Ainsss como nos quedamos enganchados a veces con lo que pudo ser pero no ha sido ¿verdad? Soltar, soltar no es un sacrificio, es un dar gracias por lo aprendido para dejar fluir lo nuevo.
«¿Cómo es que, siendo tan inteligentes los niños, son tan estúpidos la mayor parte de los hombres? Debe ser fruto de la educación»
Alejandro Dumas.